Hacer una mudanza con plantas puede dar miedo si somos amantes incondicionales de ellas. Para muchos, el verano es una época fantástica en la que han tenido tiempo de atender a todas sus plantas y que estas crezcan. Llega el momento de la mudanza y, ¿qué hago con mis plantas?

Hoy en el blog, te vamos a dar las claves de cómo hacer una mudanza sin estropear las plantas y que lleguen en perfecto estado a tu nuevo destino, ya sabes que llevamos más de 30 años en el sector y, bueno, sabemos algo de esto. 

Antes de las mudanzas

Lo primero que debes hacer si eres un amante de los jardines y las plantas son algunas preguntas relacionadas con lo que tienes y con el sitio al que vas y, valorar en la medida de lo posible si realmente es viable o no llevarlas contigo.

La primera pregunta que podrías hacerte es ¿tengo espacio suficiente en el nuevo hogar o en la próxima oficina? A partir de esta cuestión saldrán otras como por ejemplo, ¿qué tamaño tienen las plantas, árboles o flores de mi jardín, terraza o piso? 

En segundo lugar, puedes hacerte la siguiente pregunta está relacionada con el clima, a veces, si cambias “solamente” de ciudad podría ser muy fácil, pero sabemos que hay un montón de mudanzas internacionales o nacionales en las que el clima cambia mucho. Por ejemplo, nosotros que tenemos nuestra sede principal en Asturias, notamos muchísimo cambio en relación a zonas del sur de España. 

En tercer lugar tienes que valorar también el tipo de estación en la que estés, y es que, el otoño o la primavera pueden ser las mejores para hacer un transplante o cambiar a las plantitas de sitio. 

De cara a la mudanza

Ahora, que ya nos hemos hecho estas preguntas y, sabemos qué vamos a hacer con todas nuestras plantas o árboles es el momento de ver cómo es la mejor forma para transportarlas sin que tengan ningún tipo de complicación. 

Lo primero que tenemos que hacer es adecuar las plantas para que tengan el menor estrés posible, unos días antes de la mudanza puedes “ponerlas a punto” podarlas y trasplantarlas a un tiesto que sea de plástico, de este modo, también evitarás que se rompa la maceta en la que va. 

El día de la mudanza prepara tus plantas con papel de embalaje, normalmente con un papel fino que cubra las hojas puede servir, aunque también puedes ayudarte de papel de embalaje para las suculentas para una mayor protección. Y si no estás seguro, siempre puedes hacer a medida una especie de protector con cartón alrededor de las plantas. 

Otro tema es la hidratación de las plantas, debes asegurarte de que durante la mudanza están en lugar seco, aunque quizá si se trata de un viaje muy largo tendrás que asegurarte que no se resecan o estén demasiado húmedas. 

Una vez en el nuevo hogar

Lo primero que debes hacer nada más llegar al nuevo destino es desembalar las plantas y comprobar cuál es su estado. Limpia con cuidado las hojas y flores por si acaso han acumulado algo de polvo. Colócalas en el lugar donde estimes que será mejor para ellas para que vayan adaptándose a su nuevo hogar. 

Por último riégalas, y ya pasados unos días, trasplántalas a sus macetas correspondientes. 

Todo esto, sabemos que es difícil, pero también que las plantas son un ser vivo que dan vida a tu hogar, en Legaspi Sella Mudanzas sabemos cómo cuidarlas porque llevamos más de 30 años haciendo mudanzas. Si quieres hacer una mudanza, pídenos presupuesto sin compromiso estamos en el mail info@legaspisellamudanzas.com, también en redes sociales en Facebook e Instagram, por teléfono en el 985 33 13 37  o si lo prefieres puedes rellenar nuestro formulario en esta sección de nuestra web